Sagradas Escrituras (Biblia del Oso) - 15691  ¶ Al Vencedor: Salmo de David. Los cielos cuentan la gloria de Dios, y el extendimiento denuncia la obra de sus manos.  4  En toda la tierra salió su hilo, y al cabo del mundo sus palabras. En ellos puso tabernáculo para el sol.  6  De un extremo de los cielos es  su salida, y su curso hasta la extremidad de ellos; y no hay quien se esconda de su calor.  7  ¶ La ley del SEÑOR es  perfecta, que convierte el alma; el testimonio del SEÑOR es  fiel, que hace sabio al pequeño.  8  Los mandamientos del SEÑOR son  rectos, que alegran el corazón; el precepto del SEÑOR es  puro, que alumbra los ojos.  9  El temor del SEÑOR es  limpio, que permanece para siempre; los derechos del SEÑOR son  verdad, todos justos.  10  Deseables son  más que el oro, y más que mucho oro afinado; y dulces más que miel, y que licor de panales.  13  Detén asimismo a tu siervo de las soberbias; que no se enseñoreen de mí; entonces seré perfecto, y estaré limpio de gran rebelión.  14  Sean gratos los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón delante de ti, oh SEÑOR, roca mía, y redentor mío   |